Seguro que alguna vez has visto bailar una pareja que te ha dejado con la boca abierta. Los movimientos sincronizados entre los dos, la coordinación de sus cuerpos, la musicalidad a flor de piel.
¿Es que se han aprendido de memoria la coreografía? ¿Es que lo ensayan a diario? ¿Es que simplemente tienen talento y son de otro mundo?
Seguramente, lo que tienen es que saben conducir y dejarse llevar. Esto está claro que no se aprende de un día para otro y que se necesitan conocimientos de baile. Como que todos hemos padecido algún baile “incómodo” con alguien, deseando que se acabe la canción, os dejamos unos pequeños trucos que os pueden ayudar tanto si sois de los que conducís como de los que os dejáis llevar.
Seguro que alguna vez has visto bailar una pareja que te ha dejado con la boca abierta. Los movimientos sincronizados entre los dos, la coordinación de sus cuerpos, la musicalidad a flor de piel. ¿Es que se han aprendido de memoria la coreografía? ¿Es que lo ensayan a diario? ¿Es que simplemente tienen talento y son de otro mundo? Seguramente no. Seguramente, lo que tienen es que saben conducir y dejarse llevar. Esto está claro que no se aprende de un día para otro y que se necesitan conocimientos de baile. Como que todos hemos padecido algún baile “incómodo” con alguien, deseando que se acabe la canción, os dejamos unos pequeños trucos que os pueden ayudar tanto si sois de los que conducís como de los que os dejáis llevar.
Para los que conducís (leaders):
- Primero de todo, calibrar el nivel. Empezar a hacer todas las figuras y pasos complicados que tienes en mente, sólo servirá para asustar al/a la follower y que se sienta incómodo/a durante todo el baile. No debes demostrar nada a nadie. Empieza por pasos fáciles y comprueba cómo responde a lo que le estás guiando. Poco a poco puedes ir “jugando” y aumentando el nivel.
- Sé suave. Tu pareja no es como un juego de la “play”, donde pulsas ciertos botones y responde instantáneamente. Procura anticipar los movimientos, marcar los pasos con tiempo suficiente para que tenga tiempo de entenderlo. Piensa que la figura la indicas tú pero es el/la follower quién la debe bailar. No empujes ni aprietes, sé suave.
- Empatía. Es importante crear un clima tranquilo y cálido entre los dos. Poner buena cara y sonreír (no poner mala cara si no te sigue). La calma y el buen rollo entre los dos hará que la energía fluya y todo el baile sea más fácil.
- No dar nada por hecho. Si tu pareja siempre hace “2 básicos-1 vuelta-2 básicos-aquel paso que le gusta-2 básicos”…No des por hecho que siempre lo vaya a hacer así. Deja que pruebe aquel paso que todavía no le sale pero casi casi ya lo tiene. Debes estar atento/a constantemente a ver qué hará después.
- Paciencia, paciencia. Ser “el que conduce”(leader) no es nada fácil. No sólo debe tener claro el paso que quiere hacer y acordarse de la ejecución, sino que además debe saber tu paso y conocer cómo conducirte para que lo hagas. Por lo tanto, no es nada fácil. Al principio deberás tener un poco de paciencia y esperar un poco entre figuras/pasos, pero es la única manera que tiene el leader para aprender. Esta paciencia es una inversión. Verás que enseguida cogerá más agilidad y coordinación.
- Se suave, pero sin pasarte. El hecho de no saber qué paso vendrá después y de saber “que debo dejarme llevar”, a menudo nos hacer estar tensos/as. “Keep calm”, coge aire y respira. Poner los brazos fuertes y pesados sólo complicará la conducción, pero cuidado también con no estar demasiado flojo/a. Coge una posición corporal correcta, con la espalda recta, los brazos con tensión “activa” (tensión justa para responder a la conducción del leader).
- 1 objetivo: estar atento/a a la pareja. Durante todo el baile, sólo debes preocuparte de entender lo que te está mandando y hacer los pasos que corresponden. No intentes lucirte por ti mismo/a. Si entiendes todo lo que te guía, entonces podréis empezar a luciros los dos.
Esperamos que estos pequeños detalles de puedan ayudar en la pista de baile.
Recuerda, ¡que lo más importante es practicar mucho!
